En muchas ocasiones, el uso que se va a realizar de un depósito de poliéster requiere de su soterrado o enterrado. Sin embargo, no todo vale a la hora de enterrar un depósito de poliéster. Si no seguimos una serie de indicaciones, el depósito puede resultar dañado, daños que, estando dicho depósito bajo tierra, tendrían una difícil solución. Para evitar estos quebraderos de cabeza, desde Poliestsur queremos darte una serie de consejos que te ayudarán a enterrar adecuadamente tu depósito de poliéster.
REALIZA UNA EXCAVACIÓN ADECUADA
Lo primero que tenemos que hacer cuando queremos enterrar un depósito de poliéster es realizar la excavación donde vamos a ubicar dicho depósito. En el fondo de la misma, debemos hacer una base de hormigón en la que apoyaremos el depósito. Previamente, debemos asegurarnos de excavar una superficie que nos permita introducir nuestro depósito con un pequeño margen que nos permita realizar cualquier maniobra necesaria. Con unos 15 o 20 cm de margen sería suficiente.
CUIDADO CON LOS GOLPES
Una vez realizada la excavación y lo tenemos todo listo para introducir nuestro depósito en el agujero realizado, debemos asegurarnos de introducirlo con cuidado, sin que reciba ningún golpe que pueda causar daños en el mismo. En caso de sufrir algún tipo de golpe, se aconseja volver a sacarlo y asegurar que no ha sufrido daño alguno ya que, como indicábamos algunas líneas más arriba, una vez enterrado el depósito cualquier daño es difícilmente reparable.
RELLENA LA EXCAVACIÓN CON LOS MATERIALES ADECUADOS
Una vez enterrado el depósito, se recomienda que se rellene de con agua de forma simétrica, en caso de tener varios compartimentos. La cantidad de agua recomendada es de ⅓ de su capacidad para que quede bien asentado.
En cuanto al relleno de la excavación, este será realizado con grava fina, siempre libre de piedras o cualquier elemento que pudiese dañar la superficie del depósito. Sin embargo, debemos tener especial atención al terreno en el que estamos enterrando el depósito. En caso de existir peligro de aparición de aguas subterráneas, optaríamos por hormigón líquido para el llenado de la excavación.
Como parece evidente, debemos asegurarnos de que el depósito quede totalmente sepultado. Una vez sepultado, pondremos justo encima una capa de hormigón de un grosor no superior a los 15 cm.
Si deseas adquirir e instalar depósitos de poliéster de calidad y, además, totalmente a medida, confía en Poliestsur y nuestros más de 30 años de experiencia en el sector de la fabricación e instalación de materiales de poliéster.